Una semana mixta en las bolsas a nivel mundial ha sido la recién pasada, pero con movimientos más bien acotados. En el caso de los índices bursátiles estadounidenses, aunque a mediados de semana se volvía a máximos históricos, posteriormente se tenderían a borrar estas ganancias para cerrar más bien planos. A medida que nos vamos aproximando a la próxima reunión de la Reserva Federal, agendada para el 16 y 17 de septiembre, crece la expectación del mercado que, si bien se tiene una expectativa bastante difundida para la posibilidad de un recorte de 25 puntos base en la tasa de política monetaria, las cifras que se van dando a conocer día a día van siendo incorporadas a la confección del escenario base, lo que genera cierta volatilidad.
El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos correspondiente al segundo trimestre fue corregido al alza, alcanzando un 3,3% trimestral anualizado, por encima del 3,1% dado a conocer originalmente, reflejando además una fuerte recuperación respecto de la caída del -0,5% reportado para el primer trimestre. Dentro de las razones que explican la mejora en comparación con la primera lectura, se encuentra una corrección al alza en la inversión empresarial, que pasó de un 1,9% a un 5,7%. También fue revisado ligeramente al alza el consumo privado, que subió de 1,4% a 1,6%, lo que fue parcialmente contrarrestado por una revisión a la baja del gasto público (-0,2% frente a 0,4%) y una revisión al alza de las importaciones (-29,8% frente a -30,3%).
El Índice de Precios del Gasto en Consumo Personal (PCE), que en su variante subyacente representa la medida favorita de la Reserva Federal para seguir el cumplimiento de su meta inflacionaria, fue publicado el viernes. El PCE total del mes de julio presentó un alza del 0,2%, por debajo del dato anterior (0,3%). Por su parte, el aumento en 12 meses fue de 2,6%, en línea con el dato de junio. Respecto a la medida subyacente, que excluye alimentos y energía, fue 0,3%, en línea con el dato anterior, mientras que medida en doce meses, aumentó 2,9%, por encima del registro anterior (2,8%). Todas estas cifras se encontraron en línea con las expectativas que tenía el mercado.
Además, el ingreso personal se incrementó en un 0,4%, mientras que el gasto personal lo hizo en un 0,5%, ambas cifras también en línea con lo esperado. Al estar el reporte de acuerdo con lo proyectado, las expectativas de un posible recorte de 25 puntos base por parte de la Fed en septiembre se vieron reforzadas, sin embargo, el hecho de que el índice subyacente en términos anualizados alcance un 2,9%, con cierta presión sobre el sector servicios, introdujo volatilidad a los instrumentos financieros.
Respecto de los resultados corporativos del segundo trimestre, la semana pasada tuvimos la publicación del reporte de probablemente una de las compañías más icónicas dentro de las conocidas popularmente como “siete magníficas”, las cuales han liderado de manera relevante las alzas en el sector tecnológico y que han empujado también al resto del mercado. Es así como la compañía Nvidia, presentó unos resultados mixtos, y que dejaron diferentes lecturas para los inversionistas. Por una parte, en términos de beneficios, la compañía publicó un resultado de US$1,04 por acción, cifra que se encuentra por encima de los US$1,01 que esperaba en promedio el mercado, en tanto que, respecto de los ingresos, estos ascendieron a US$46,7 billones, también batiendo las expectativas que apuntaban a US$46,1 billones. No obstante, su principal negocio, los centros de datos, se ubicaron algo por debajo de las expectativas, dejando un tono más bien negativo en la evaluación final, lo que lograba ser al menos compensado en parte por la noticia de que Nvidia podría vender su chip de Inteligencia Artificial Blackwell en China.
La temporada de entrega de resultados corporativos del segundo trimestre en Estados Unidos continúa con su avance, del total de 3.109 compañías bajo cobertura, 2.933 de ellas ya han realizado su reporte trimestral. En términos de ingresos por ventas, respecto del mismo trimestre de 2024, hasta ahora existe un crecimiento del 5,56%, cifra que se eleva hasta 15,04% en relación con la utilidad neta. Por otra parte, y en términos de la sorpresa generada respecto de las expectativas previas que tenía el mercado, a nivel de ingresos por ventas los resultados efectivos están un 1,75%, por encima de las proyecciones. Mientras tanto, y al hablar de utilidad neta, la sorpresa también es positiva y en este caso es un 7,39% superior a lo que el mercado esperaba.
El Banco Central de Chile informó hoy que el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) correspondiente al mes de julio creció un 1,8% frente al mismo mes del año pasado, ubicándose levemente por debajo de lo esperado (1,9%). El resultado se explicó por el crecimiento del comercio (6,6% anual), impulsado por el dinamismo mayorista (maquinaria, alimentos, vestuario) y el repunte del comercio minorista y automotor. A su vez, los servicios subieron 2,6%, gracias a la expansión de los servicios empresariales y personales. En contraste, la producción minera cayó -3,3%. Cabe destacar que este mes registró la misma cantidad de días hábiles que en julio de 2024.
En términos desestacionalizados, la actividad avanzó 1,0% respecto al mes previo y 2,3% en 12 meses, reflejando cierta resiliencia, aunque con señales de desaceleración. La caída de la minería fue uno de los principales factores detrás del resultado. Sin embargo, buena parte de esta contracción responde a elementos puntuales, como los efectos de los aranceles internacionales y el accidente en Escondida, por lo que la recuperación del sector podría tardar algo más, aunque las perspectivas a mediano plazo siguen siendo favorables.
En síntesis, la economía mantiene un crecimiento moderado, con consumo y servicios sosteniendo la actividad, mientras la política monetaria sigue con espacio para apoyar la recuperación si la inflación permanece contenida.
De acuerdo con lo informado por el INE, la tasa de desempleo correspondiente al período mayo – julio de este año cayó a un 8,7% desde el 8,9% del periodo anterior. Por su parte, la tasa de desempleo desestacionalizada se mantuvo en 8,9%.
Las cifras siguen mostrando un mercado laboral frágil, donde en un año se han creado solo 72 mil nuevos puestos de trabajo, principalmente gracias a una menor destrucción de empleo informal, que incluso muestra recuperación en el margen.
En cuanto a las personas ocupadas, estas aumentaron 0,8% en 12 meses, la expansión fue incidida, principalmente, por los sectores de industria manufacturera (5,5%), comunicaciones (23,3%) y minería (11,6%). Además, la población fuera de la fuerza de trabajo aumentó 1,1% en doce meses, influida por la fuerza de trabajo potencial, que son personas que en su mayoría no estaban buscando un trabajo, pero estaban disponibles para ello. Por su parte, la tasa de ocupación informal alcanzó 26,0%, decreciendo 0,4 pp. en 12 meses.